te quiero.

Te quiero tanto que me duele cada año que pasa, cada año vivido, cada año en el que comprendes un poco más que para ti todo es distinto, que no eres como el resto... Y no hay dolor más amargo que esta impotencia de saber que tu felicidad no está en mis manos, que por mucho que lo intente habrá momentos en los que no este para defenderte, momentos en los que otros te hagan sentir que no eres importante, en los que se rían de ti cuando no puedas controlarte...Han pasado 17 años y aún sigue habiendo noches en las que necesito desahogarme al pensar en tu futuro... Nadie imagina el mar de lágrimas que derramé por ti de niña en la almohada, de saberlo muchos comenzarían a medir sus palabras, risas y miradas hacia ti, y es que nunca comprenderé que ganan con hacerte sufrir más de lo que tú ya sufres en tu silencio.Quería agradecerte,aunque tal vez nunca leas esto, todo lo que gracias a ti he aprendido. Porque te debo la humildad, te debo el cariño, te debo el respeto con el que trato a los que los demás consideran menos, y por último te debo haber comprendido lo que muchos no comprenden en toda una vida, que nadie es más que nadie, y que por lo tanto nadie es menos que nadie.